Aragón - Provincia de Huesca


La Asunción de Navasa
(Jaca, La Jacetania)
42º 31,937'N ; 0º 28,913'O      




Iglesia del siglo XII, formada por una sola nave, con cubierta de madera, a la que posteriormente se añadieron capillas laterales.


La cabecera está formada por un ábside semicircular, realizado con sillares de grandes dimensiones y perfectamente tallados. En la parte central se abre una ventana de un solo derrame.


Interiormente estaba decorado con pinturas murales, que hoy se encuentran en el Museo Diocesano de Jaca. Fueron trasladadas a este museo en 1965. Incomprensiblemente, y como empieza a ser demasiado habitual en los museos de arte, la renovación de los criterios de museización ha comportado la reducción de piezas visibles en la exposición permanente procedentes de este templo. No entenderé por qué se prefiere tener las obras cerradas a cal y canto y las paredes del museo medio vacías. La no presencia de todas las obras conservadas es una mutilación voluntaria de la obra, impidiendo al espectador poder hacerse una idea lo más completa posible del mensaje que quiso representar el artista y su simbología. ¿Alguien se imagina que eliminaran personajes del cuadro del Gernika o de las Meninas? Pues es lo mismo ... Un ábside es una obra completa. Omitir unas escenas y enseñar otras es manipular la obra y por lo tanto un desprecio y un insulto hacia el visitante, al que le están diciendo lo que puede ver y lo que no, por que si le enseñaran todo se despistaría o no lo entendería ... Es decir, este nuevo criterio museístico está diciendo "no te enseño todas las obras que tengo, por que entonces el museo sería demasiado extenso y te daría pereza visitarlo. Total, como no lo entenderás ..." . Así pues, sólo podremos enseñar aquellas escenas expuestas en el museo.



Sólo forman parte de la visita del museo dos escenas. Concretamente las que representan la adoración de los Reyes y de la huida a Egipto, datadas a principios del siglo XIII.


En la bóveda absidal se representó un pantocrátor que está bendiciendo con la mano derecha, mientras que sostiene un libro abierto con la mano izquierda. Le rodeaban las imágenes del Tetramorfos. También se representa a la Virgen María y el arcángel San Gabriel. Entre los años 2016 y 2017 se han restaurado los seis fragmentos no expuestos de este ábside, gracias a la subvención del ayuntamiento de Jaca. Muy lógico invertir dinero público en restaurar unas pinturas que nadie que visita la ciudad puede contemplar.

También nos sorprendió no haber encontrado ninguna reivindicación de las instituciones aragonesas para que se devuelvan las pinturas al templo, teniendo en cuenta el criterio esgrimido por las autoridades de Aragón últimamente en el caso de Sigena, donde han afirmado que las pinturas deben ser conservadas en el lugar para el que fueron creadas. Quizás es por que no están conservadas en un museo catalán y por tanto no es importante que se conserven in situ y pueden estar en un museo aragonés, lejos de su templo original, pero no en "el extranjero". Ya que no se exponen en el museo, ¿por qué no se devuelven a su lugar original?

El tejado del ábside se apoya en una cornisa, sustentada por ménsulas decoradas de una manera muy sencilla.


Adosada al muro norte, junto a la cabecera, se alza majestuosa la torre campanario. Está formada por cuatro cuerpos, separados por impostas. Los ventanales han sido cegados a lo largo de los siglos y esperan pacientes que en alguna campaña de restauración se les devuelva su estado original. En la última campaña se aseguró su estabilidad, pero no se abrieron las ventanas.


Una de las pocas aberturas que se conserva es uno de los ojos de una ventana geminada del muro este. Todavía se encuentra in situ el capitel de la columna que separaba las dos ventanas, decorado con motivos vegetales.


Se accede al templo por una puerta situada en el muro oeste, protegida por un pórtico de factura moderna.


Está formada por tres arquivoltas de medio punto en gradación, que rodean un tímpano que nos recordó al de la catedral de Jaca, aunque es mucho más rudimentario.


Podemos ver un crismón rodeado por una fiera, un hombre, un jabalí y una gran ave.


En el interior del templo se conserva una gran pila bautismal de inmersión. Tiene forma cuadrada y está decorada con motivos de soga en las esquinas. Hasta hace pocos años, estaba fuera de la iglesia y servía de abrevadero para los animales.